En el suelo se desarrolla una vida muy activa. Entre la tirra, las piedras, las raíces de las plantas hay una inmensa población de seres vivos que tienen su fuente de vida en el suelo y que, a su vez, forman un elemento indispensable del mismo. Lo liberan de animalillos y vegetales muertos, restituyendo al suelo los materiales útiles, "labrando" la tierra y fertilizándola (como las lombrices por ejemplo), surtiéndola de nitrógeno, oxígeno y materiales nitritivos que, a su vez, servirán a todos sus habitantes, en una cadena alimenticia poco visible, quizáz, pero de enorme utilidad. Allí se encuentran bacterias que contribuyen a la descomposición de las hojas y detritos, setas que con sus hifas se infiltran por cualquier espacio pequeño, semillas y esporas que germinan, gusanos que aran el terreno, etc.
Esta serie incluye las siguientes preparaciones:
- Bacterias del suelo, m.c.
- Hifas de Setas, s.t.
- Cuerpo
fructífero
de seta (Psalliota sp.).
- Esporas con elaterios de Equisetum sp..
- Hojas de musgo, m.c. vista lateral.
- Aguja de pino (Pinus sp.), s.t.
- Venación de una hoja de una planta caducifolia.
- Hoja en descomposición formando el humus.
- Ácaros del suelo del bosque, m.c.
- Lombriz de tierra (Limbricus terrestris), s.t. del cuerpo.
m.c. = muestra completa; s.t. = sección tansversal; s.l. = sección longitudinal.
Incluye 10 portaobjetos y cubreobjetos.
